¡ Libertad! El sendero de Jesús
Lucas 9,51-62
Por José Ramón Ruiz Villamor Sacerdote (miembro de CSJ)
Vivir en cristiano es vivir en novedad.
Vivir en cristiano es vivir en libertad.
Este mensaje está al centro del trozo de evangelio de Lucas.
Pero, contrasta con la idea generalizada sobre el cristianismo. Porque los juegos de la historia y los intereses de la política identifican al cristianismo con posiciones conservadoras y retrógradas.
Personalmente no me preocupa lo que esta crítica pueda afectar a la Iglesia. Considero más bien que le ayuda a verificar si lo que hace y trasmite están cerca del evangelio.
Me entristece por lo que perjudica a cada persona y especialmente a cada joven que puede creerse que el mensaje de Jesús «no es joven», «no es moderno» y tenga poco que aportar en la vida.
El texto narra el momento en el que Jesús determina cumplir su vocación. Y decide ir a Jerusalén.
Cuando se iba cumpliendo el tiempo de ser llevado al cielo, Jesús tomó la decisión de ir a Jerusalén. Y envió mensajeros por delante.
De camino entraron en una aldea de Samaría para prepararle alojamiento. Pero no lo recibieron, porque se dirigía a Jerusalén.
Al ver esto, Santiago y Juan, discípulos suyos, le preguntaron: –Señor, ¿quieres que mandemos bajar fuego del cielo que acabe con ellos?
El se volvió y les regañó. Y se marcharon a otra aldea.
Mientras iban de camino, le dijo uno:
–Te seguiré adonde vayas.
Jesús le respondió:
–Las zorras tienen madriguera y los pájaros, nido, pero el Hijo del Hombre no tiene donde reclinar la cabeza.
A otro le dijo:
–Sígueme.
El respondió:
–Déjame primero ir a enterrar a mi padre.
Le contestó:
–Deja que los muertos entierren a sus muertos; tú vete a anunciar el Reino de Dios.
Otro le dijo:
–Te seguiré, Señor. Pero déjame primero despedirme de mi familia.
Jesús le contestó:
–El que echa mano al arado y sigue mirando atrás, no vale para el Reino de Dios.
Jesús anda un camino y propone un estilo de vida. No enseña una doctrina.
Así, al leer texto sentimos como si Jesús agarrara nuestros hombros mientras clava sus ojos serenos en los nuestros y a la par que nos zarandeara oímos su voz “he decidido jugarme la vida como portavoz de Dios delante de los jefes y señores de este mundo. ¿Te vienes conmigo?”
En el fondo lo que Lucas plantea, con su texto, ayuda a iluminar la autenticidad en la propia vida:
– ¿Para qué seguir a Jesús?
– ¿Por qué romper con las ideologías familiares?
– ¿Por qué no mirar hacia atrás?
La respuesta a estas preguntas es clara: la tarea del Reino de Dios exige una mentalidad nueva, liberadora.
El seguidor de Jesús se abre a un horizonte nuevo,
a una familia universal,
a una religión de vida.
Las palabras de Jesús son radicales, incluso parecen utópicas.
Pero van a la raíz de la vida.
Y, aunque son rupturistas, no son angustiosas.
Porque, a diferencia de nuestras reflexiones estériles que emergen en nuestro interior cuando nos invade el desánimo, la propuesta de Jesús transforma nuestro entorno social y religioso. No solo nuestra vida.
Así el mensaje del evangelio supone una crítica radical a las instituciones sociales y el desapego de los lazos sociales.
Todo sin violencia.
Su propuesta es sencilla y clara: el Reino de Dios es lo único que otorga la libertad a quien la anhela.
A ti … “Gracias por hacerlo realidad día a día”